Según voceros de la BN, la directora del instituto, María Pía López, estuvo acompañada por algunos de sus colaboradores más cercanos ajustando detalles de último momento, aunque no hizo declaraciones a la prensa.

Sin embargo, la curiosidad de los porteños y algunos turistas funcionó como suele suceder con las novedades edilicias o de otro tipo, con una cantidad apreciable de público que con el correr de los días irá rotando, volviendo o yendo por primera vez.

Se calcula que para los primeros días de noviembre estarán todos los dispositivos tecnológicos en pleno funcionamiento, y que se estacionará un público afín a la propuesta, que se sostiene en una serie de juegos, estaciones y recorridos que darán cuenta de la historia del castellano y la radiación de su influencia en idiolectos y lenguas más o menos privadas.