En el marco de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente se deben centrar los esfuerzos en motivar a las personas y comunidades, para que se conviertan en agentes activos del desarrollo sostenible y de protección del medio ambiente.

Anualmente se elige un tema central para conmemorar el Día Mundial del Medio Ambiente. En 2023 la campaña del Día Mundial del Medioambiente lleva como lema: "Sin contaminación por plásticos".

400 millones de toneladas de plástico. Es la cifra de plásticos que se producen a nivel mundial cada año. Y más de la mitad son plásticos de un solo uso. Menos del 10% se recicla. De toda esta cantidad de plástico entre 19 y 23 millones de toneladas acaban en ríos, lagos y mares. Los microplásticos invaden el agua y el aire y ello incide negativamente en la salud de las personas y del planeta.

Estos datos son insostenibles y por ello en 2023, el tema del Día Mundial del Medio Ambiente se centra en el problema del plástico. La ONU considera que existen avances científicos y soluciones que podrían resolver esta crisis, y que solo hace falta voluntad política y que todos los agentes sociales se impliquen en el cambio.

¿Cómo celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente?

Celebremos el Día Mundial del Medio Ambiente hoy y todos los días. Todos podemos colaborar, tomando conciencia acerca de la conservación del medio ambiente, con las siguientes acciones:

  • Reciclar y reutilizar los productos que consumimos: papel, plástico y otros materiales.
  • Utilizar racionalmente el agua potable.
  • Plantar árboles en nuestra comunidad.
  • Sustituir el uso de vehículos por una bicicleta o caminar.
  • Cerrar adecuadamente los grifos y controlar las fugas de agua.
  • Utilizar pilas y baterías recargables.
  • Separar los residuos sólidos orgánicos e inorgánicos (basura).
  • Aprovechar la luz natural para reducir el consumo de energía eléctrica y apagar las luces que no estemos utilizando.
  • Consumir frutas, vegetales y verduras que no contengan fertilizantes, ni otros productos contaminantes.
  • Desenchufar los aparatos eléctricos que no se estén utilizando.
  • Regular el uso el consumo de energía de la calefacción y el aire acondicionado, utilizando el termostato.