El Día Mundial de la Lucha contra el SIDA se ha convertido en uno de los días de la salud más reconocidos y supone una oportunidad para recordar a los que han fallecido, crear conciencia y celebrar victorias como el acceso a servicios de prevención y tratamientos antirretrovirales.

En 2004 se creó el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA).

Desde entonces se han propuesto temas para el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA. Estos temas tienen una duración de uno a dos años y no solo se usan para el día mundial sino para trabajar por la lucha contra el SIDA en general.

La campaña del Día Mundial del Sida de 2019 tuvo como lema "Las comunidades marcan la diferencia". Y se centró en el esfuerzo de las comunidades para la lucha contra el SIDA en un momento donde la falta de financiación hizo peligrar la sostenibilidad de los servicios.

Las comunidades tienen el poder de seguir liderando la lucha contra el SIDA: trabajadores sociales y sanitarios, asociaciones de personas que viven con el VIH, las mujeres, los jóvenes, colectivos afectados, todos ellos tienen la llave para seguir luchando contra esta enfermedad.

En 2022, la igualdad sigue siendo el grito de la campaña por el Día Mundial contra el SIDA. Las desigualdades que dan continuidad a la pandemia del SIDA se pueden evitar, y de esta forma será más fácil frenar la infección. Los datos demuestran que en los últimos años en los que ha aparecido el COVID, los recursos contra el SIDA se han reducido y se han puesto en riesgo muchas vidas.