CINCO PUNTOS DE UNA NUEVA ARQUITECTURA


La búsqueda de esta utilidad llevó a Le Corbusier a inspirarse en alguna de las nuevas máquinas que irrumpían por entonces en la vida de las personas, como son el avión y el automóvil. Con el paso de los años, el prestigioso arquitecto fue consolidando su discurso hasta publicar en 1927 los 'cinco puntos de una nueva arquitectura'.

Estos puntos pasan por que toda vivienda debe tener la planta baja sobre pilotes para hacer hueco al automóvil. Además, destaca la importancia de las plantas libres y de la fachada libre,como segundo y tercer punto. El cuarto postulado de este escrito hace referencia a las ventanas alargadas para liberar los muros. Finalmente, el quinto de los puntos se centra en las terrazas-jardín.

A 50 años de su muerte, recordamos algunas de sus obras más admiradas, convertidas hoy en día en joyas de la arquitectura mundial.

1. Villa Saboya (1929). Este edificio situado en Poissy, a las afueras de París, es considerado como el paradigma de la Arquitectura Internacional y de la nueva manera de construir edificios de viviendas del siglo XX. Actualmente se encuentra restaurada como casa-museo y está protegida como monumento nacional francés.

2. Unidad de Habitación (1953). Este conjunto de viviendas ubicado en Marsella es uno de los proyectos icónicos de Le Corbusier, con el que abogó por rascacielos como unidades de arquitectura urbana integradas. Este concepto de sistema de viviendas colectivas sería la base de varias viviendas diseñadas por él en toda Europa con ese nombre.

3. Casa Curutchet (1953). Diseñada por Le Corbusier para el cirujano Pedro Domingo Curutchet, esta vivienda unifamiliar debe su fama mundial a que es la única construida en América del Sur.

4. Capilla de Notre Dame du Haut (1955). Esta iglesia situada en Ronchamp (Francia) es uno de los ejemplos más importantes y más acertados de la arquitectura religiosa del siglo XX. El predominio de las curvas y el juego de materiales hacen de esta capilla una obra única, para la que Le Corbusier dejó a un lado su mentalidad programática para dar paso a la libertad de formas.

5. Pabellón Philips (1958). Este edificio fue una construcción efímera diseñada para la Exposición universal de Bruselas de 1958. El Pabellón alcanzó gran notoriedad en aquella época por la radicalidad de su planteamiento, en el que se creó una experiencia multidisciplinar a través de la arquitectura, la imagen y el sonido.