Nacido en Reus, Tarragona, en 1852, el trabajo Gaudí fue controversial: sus creaciones siguen convocando adhesiones y rechazos, tal como sucedió en los años finales del siglo XIX y las primeras décadas del XX. Su producción, al igual que su personalidad, no encajaban con el ambiente de la burguesía barcelonesa de la época.

De origen humilde y provinciano (su padre era calderero, el equivalente a lo que en Buenos Aires se denominaba tachero , el que elaboraba artesanalmente piezas de metal: pavas, cacerolas o palanganas), Gaudí mantuvo siempre un carácter introvertido. Y se lo llegó a calificar como misógino.

A pesar de su hermetismo, pasado un siglo de muchas de sus obras, su fama es mundial y su nombre convoca a los arquitectos, críticos y amantes del arte en general, aún 87 años después de su muerte en 1926.