Esta prenda habría pertenecido a pastores nómadas de Asia Central. Todos los datos apuntan, además, a que estos habrían sido los inventores de la prenda, que les permitía mayor libertad de movimientos cuando montaban a caballo, y por lo tanto una cierta ventaja en la guerra contra otros jinetes.

Los dos pastores hallados en la tumba con los pantalones tenían aproximadamente unos 40 años en el momento de su muerte y fueron enterrados con diversos objetos de cuero y metal, señal de que eran guerreros.

Los resultados de este descubrimiento, publicados en Quaternary International, revelan que cada uno de los pantalones se halla cosido, formado por tres piezas de lana marrón: una para cada pierna, y otra para la entrepierna. El diseño final incluye aberturas laterales, cadenas de sujeción en la cintura y motivos decorativos.

Ahora no está demasiado claro si el invento se extendió al resto del mundo desde allí o surgió en varios lugares y épocas independientemente. Los autores del descubrimiento, señalaron que no suele ser habitual que tejidos de tanta antigüedad sobrevivan sin descomponerse, así que no saben si será posible realizar un hallazgo similar en otras partes del mundo.

Fuente : Clarín.com